Entrevista a Marta Díaz Gómez. Pediatra. Profesora titular de la Universidad de la Laguna (Sta Cruz de Tenerife). Coordinadora del Comité de Lactancia de la Asociación Española de Pediatría.

Marta Díaz participa en el XIV Congreso FEDALMA 2017 en la Mesa Redonda LACTANCIA EN LAS TIC: App Comité de Lactancia.

marta diaz

“Para mejorar la calidad de la atención a la salud de las madres y los niños es necesario una sistematización de la formación en lactancia para todos los profesionales de la salud, independientemente de su sexo, edad, situación familiar y elección personal del método de alimentación de sus hijos.”

Entrevista

Marta explícanos cuando se despierta tu interés por la lactancia?

Mi relación con la lactancia empezó en la época de residente de pediatría. En el periodo que roté por la planta de Nidos y Maternidad, me preocupaba ayudar a madres con las dificultades iniciales y se reforzó cuando fui madres y amamanté a mis dos hijos.

Entonces eres de las que piensas que a la sensibilización sobre el tema solo se llega si has sido madre y has dado pecho? O sin embargo depende de otras cualidades?

No se llega solo de esa forma, pero si puede contribuir a reforzar aspectos como la motivación e interés por el tema y la empatía.
Para mejorar la calidad de la atención a la salud de las madres y los niños es necesario una sistematización de la formación en lactancia para todos los profesionales de la salud, independientemente de su sexo, edad, situación familiar y elección personal del método de alimentación de sus hijos.

Me comentas que terminas la especialidad de pediatría en 1981 y que eres uno de los miembros más antiguos del comité, vocal desde 1996 y te nombran coordinadora en el 2011, además de profesora por la Universidad de la Laguna. Bueno con toda esa experiencia y ese bagaje. Podrías decirnos cuantas horas lectivas se dedican a la lactancia durante la carrera o especialidad?

Hay que partir de la base de que en nuestro país no existe una formación reglada sobre lactancia materna y hay gran variabilidad en función del interés personal de cada profesor y de cada Centro.
La especialidad de pediatría, ni la de enfermería pediátrica, ni las de otras profesiones sanitarias, son competencia de la universidad. Se hace a través de la formación MIR (médico interno residente, enfermera), mediante una estancia de 4 años en un hospital, en el que rotan por diferentes secciones del hospital. La metodología educativa es la de formación continuada. El sistema de formación no ha cambiado en los últimos años.

Por otro lado, en cuanto a la carrera, el tiempo dedicado a temas de lactancia es distinto en cada titulación (no se da el mismo programa en medicina que en enfermería o en otros estudios) y también es distinto en cada universidad. Hay unas directrices generales, pero cada universidad tiene su propio plan de estudios, con diferencias en los créditos de las asignaturas, en el programa,…

En mi caso concreto, dedico unas 5 horas a la lactancia entre clases teóricas y seminarios de los alumnos de tercer curso de enfermería, tutorizo Trabajo de Fin de Grado y el Trabajo de Fin de Master sobre lactancia materna, organizamos cursos de lactancia, a los que asisten alumnos de enfermería, pediatras, matronas. En abril de 2016 fue la XIX edición de estos cursos (En este enlace está la información http://saludmaternoinfantil.es/).

Coordino un grupo de investigación de la universidad que se llama «La lactancia materna desde un enfoque multidisciplinar», del que actualmente forman parte varios alumnos que están haciendo su doctorado sobre diferentes aspectos de la Lactancia Materna (puedes verlo en este enlace: http://todosporlalactancia.com/tesis-doctorales/).

En definitiva, hacemos todo lo posible para que nuestros alumnos tengan una formación adecuada en lactancia materna. Pero soy consciente de que no en todos los centros, ni en todas las universidades, se pone el mismo hincapié.

Crees que la creación del comité de lactancia de la AEP ha ayudado a mejorar las competencias académicas?. Y así de paso explícanos cuál es el día a día de una coordinadora de comité de lactancia de dicha Asociación?

Gran parte del trabajo de coordinación se hace por mail. Solo tenemos una o dos reuniones presenciales al año. En esas reuniones fijamos los objetivos y las tareas a realizar en los siguientes meses. Los detalles los vamos concretando a través de los mails que intercambiamos prácticamente a diario. Se distribuye el trabajo entre los miembros del comité, asignando uno o dos responsables de cada tarea. Se revisan los borradores de los nuevos documentos que se van elaborando. Todos los miembros del comité aportan sugerencias y dan el visto bueno antes de colgar la versión definitiva. Trabajamos en equipo y todos tenemos un nivel de implicación y participación muy alto.

Considero que si podemos ayudar a mejorar la formación en lactancia materna.

El objetivo de nuestro Comité es promocionar la lactancia materna, difundiendo conocimientos actualizados sobre el tema y recomendaciones dirigidas tanto a las familias como a los profesionales, con la finalidad de contribuir a impulsar la formación de los pediatras y mejorar las tasas de lactancia materna en nuestro país. Para ello elaboramos documentos que difundimos a través de nuestra web (http://www.aeped.es/comite-lactancia-materna). Organizamos cursos y talleres prácticos sobre lactancia materna, respondemos a las preguntas de un foro para padres y un foro para profesionales en nuestra web, etc.

Posiblemente te pongo en un compromiso si te pregunto: Y con todo lo que se está haciendo por qué crees que aún sigamos encontrando profesionales de la salud que no estén actualizados en lactancia materna y tampoco lo reconozcan?

En general, en los últimos años asistimos a una mejoría de los conocimientos sobre lactancia materna de los pediatras aunque, como he comentado anteriormente, hay una amplia variabilidad, en función de la edad, cursos de formación recibidos, interés personal en el tema, nivel de apoyo constitucional, etc. Por otro lado, además de los conocimientos, son importantes las actitudes y las habilidades de comunicación, aspectos en los que aún queda mucho trabajo por hacer.

Participarás en el Congreso en la mesa redonda de las Tics. Si no me equivoco, en el 2016 el comité de lactancia de AEP lanzó su App y crea nueva página web (un cambio de look) , y es de lo que nos vas a hablarás y enseñarás. Intuimos que sí se quiere alcanzar más publico, llevar la información más allá, se ha de invertir en las nuevas tecnologías y aplicaciones , vamos hacia una Lactancia Materna 2.0. Pero que consejo darías a las asociaciones y asesoras en lactancia a la hora elaborar una App y ser más visibles en internet?

Desde mi experiencia es importante integrar en el equipo de trabajo a un profesional del campo de la ingeniería y alguien de diseño y publicidad. Hacer un índice, con los contenidos ordenados en apartados y subapartados. Valorar los temas a incluir en función de los criterios que previamente se hayan establecido (número de temas, en base a que se eligen,…). Resumir la información sobre cada tema, procurando que esté bien contrastada y tenga un enfoque práctico.

Algunas de las estrategias para dar mas visibilidad a la App y aumentar las descargas son: Poner la descripción de la aplicación traducida al inglés, hacer un vídeo de las características de la App, que se puede difundir a través de las redes sociales, realizar actualizaciones periódicas de la aplicación, animar a los usuarios a que den su opinión y hagan comentarios, responderles si surgen problemas e intentar solucionarlos.

Marta un placer .
Te esperamos pronto en Vilafranca del Penedès, en #Fedalma17 .

Entrevista a Maribel Matilla, enfermera pediátrica, IBCLC y asesora de lactancia en Areola

Maribel Matilla participa en el XIV Congreso FEDALMA 2017 en la Mesa Redonda “Comunicación Profesional, también en lactancia”.

maribel matilla web

“Es necesario estar bien informado y formado para evitar hacer daño; pero nuestra fuerza, la de las asesoras, es la escucha activa, y poner en palabras la emoción que lleva la madre dentro y expresa en el mensaje (en cómo hace) y favorecer que la “solución” la encuentre ella”

Maribel Matilla es diplomada en Enfermería, con la especialización en pediatría, y trabaja en atención primaria. Desde hace 5 años es asesora de lactancia materna en el grupo Areola (en El Prat, Barcelona). Se certificó como IBCLC en 2013. Es secretaria de ACPAM (Associació Catalana Pro-Alletament Matern) desde hace más de 10 años. Madre de 2 hijos.

Maribel, ¿qué falta por hacer en lactancia: ámbito de sanidad pública, voluntariado, asociacionismo profesional, IBCLC?
El equilibrio, que la lactancia no sea una acción de salud que dependa sólo de la voluntad de las personas, sino que haya una inversión seria desde las organizaciones sanitarias y no sanitarias, en formación, en investigación, en promoción y también económico. Que se le dé el verdadero valor que tiene en la vida saludable, prevención de enfermedades y mejora del nivel de salud en la infancia y vida adulta y en el PIB de un país. Desde un punto de vista reduccionista es de los pocos tratamientos que son gratuitos, y está disponible en todas las familias que van a tener una criatura. Se necesita un interés real en incluirlo en las líneas estratégicas de las políticas sanitarias, laborales, sociales y educativas.

Nos hablarás de comunicación, la importancia de cómo decimos las cosas para llegar a la destinataria de la mejora manera posible. ¿Por qué es importante cómo comunicamos?
Porque ofrecemos ayuda madre a madre, desde la vivencia y la experiencia. Porque cuando eres madre ya recibes demasiadas frases que te juzgan, te dicen lo que tienes que hacer, lo que no, y se suma la presión de la cultura y de tu propia historia sobre lo que se espera del concepto “ser madre” y siempre mirando hacia afuera. En los grupos se hace una mirada afectuosa, tranquila y con respecto, hacia dentro. No importa tanto lo que sepas, sino cómo esa información te afecta y la gestionas para conseguir tu propia decisión, vivida con respecto y de forma afectuosa con cada una.

¿Se deberían usar las mismas herramientas comunicativas en una consulta y en un grupo de voluntariado?
Por supuesto que no, el tipo de relación es diferente.
En primer lugar desde el punto de vista del motivo: a un profesional recurres con la confianza que te ayude a encontrar la causa del problema y las posibles soluciones y te acompañe en el proceso. En cambio, a pesar que muchas veces se recurre a un grupo porque los/las profesionales no sabemos suficiente o no se valora la inversión en tiempo para la lactancia, en el grupo buscas el apoyo en el día a día de la lactancia y la maternidad, los primeros días, el seguir insistiendo y consiguiendo una posición más correcta para no tener dolor, los comentarios , las dudas que surgen con las creencias y falsos mitos.
En el grupo escuchas opiniones y reflexiones de otras madres que te hacen conectar con las tuyas propias, se recibe buena información y se reflexiona con la diferente información que cada una recibe desde fuera.
Desde el punto de vista de la comunicación: el profesional, aunque maneje habilidades en este sentido, lo hace desde sus conocimientos y experiencia profesional, no hace una trasferencia con su vida y vivencias personales, porque entonces no podrá ayudarla. En cambio, el grupo conecta desde las emociones vividas y sentimientos que aparecen.

Danos 4 o 5 pinceladas para comunicar bien, para que los mensajes lleguen claros en un grupo de apoyo.
Escuchar, observar no sólo el mensaje sino lo que implica el mensaje (habla de ella y su pareja?, de la suegra, de su madre? De su mala experiencia con alguien, de su experiencia anterior? Se está cuestionando su propia valía, lo que se esperaba de ella, tiene un deseo pero siente que no puede hacerlo realidad porque los otros le piden otra cosa?, que quiere ella?) . Plasmar en palabras las emociones que expresa en el mensaje (lo que no dice, pero notamos que está sintiendo). No decir más de lo que necesita la madre en ese momento, y a poder ser, que lo puedan recibir de las otras madres, para evitar buscar en la asesora la que tiene la solución de todo. Porque la vivencia en alguien que sabes está en tu misma situación siempre es más potente. Cada madre encontrará su “solución”.
También es importante, no usar frases que ofrezcan juicios, ser respetuosa con sus opiniones y no dar tu opinión personal, al menos que ésta no sea la única información que des. A veces el reconocimiento de ese sentimiento puede ayudar si no hay otra vivencia similar en el grupo, pero no debe ser lo habitual.

Y en el centro de salud?
Observar, preguntar, escuchar no sólo el mensaje verbal sino el no verbal. Ayudar a expresar sus sentimientos, dar una devolución con todo lo que se ha detectado y dar información que le pueda ayudar a resolver. Esta debe ser, si es posible, breve, sin dar mucha información a la vez, que la pueda entender a poder ser respetando ritmos, y asegurándose que lo ha comprendido y lo va a cumplir. Sí no, se debería explorar porqué, responder a sus dudas y llegar a cesiones o pactos. Es necesario nunca ofrecer opinión personal ni experiencia propia de la situación como una posible solución.

Plataforma Lactancia Informada participa en el XIV Congreso de Fedalma 2017

Plataforma Lactancia Informada participa en el XIV Congreso de Fedalma 2017 en la Mesa Redonda REFERENTES EN e-LACTANCIA: Desde la reivindicación ”Por una lactancia informada”.

plataforma lactancia informada revisada

“La lactancia materna, al menos en nuestro país, está volviendo al lugar de donde nunca debió salir: de la cotidianeidad de la vida. Del calor de los hogares, donde se criaba sin las cargas del consumismo y de la naturalidad de los espacios públicos.”

Entrevista

Nos gustaría que nos explicarais, cómo se crea Plataforma por una Lactancia informada, ¿Quiénes son el motor y las que están detrás de esta web que intenta cuidar y tratar de difundir temas de lactancia y cuál el nexo que las unió en esta linde?

La Plataforma nace en febrero de 2015, a raíz del gran revuelo que se produjo en las redes sociales con el anuncio de la presentación de un libro escrito por un pediatra del Hospital General Universitario de Castellón. En este libro el autor difamaba la lactancia materna.
Estos hechos alarmaron y movilizaron a cientos de personas que, desde hacía años, denunciaban estas malas praxis profesionales y la difusión de información falsa sobre lactancia materna en nombre de la profesión médica.

Se organizó un pequeño grupo para lanzar una petición en Change.org solicitando que el libro fuera acompañado de las recomendaciones de la OMS y que en el hospital se supervisara el trabajo de este pediatra, ya que, a raíz de la polémica, se recogieron decenas de testimonios de madres que declararon que sus lactancias habían sido perjudicadas por él.

Este grupo fue creciendo y empezamos a organizarnos para dar forma a este proyecto. La PLI ha llegado a lo que es hoy gracias a toda la gente que ha pasado por aquí, que ha trabajado y que ha aportado un poco de su tiempo.

Actualmente, somos sietes mamás muy implicadas en la crianza respetuosa y la lactancia, las que estamos coordinando todo este movimiento : Ana Docampo, Esther Fernández, Wendy Quiñonez, Guadalupe Rodríguez, Marta Sánchez, Esther Serrano y Rosa Villaluenga.

A la plataforma además de aportar nuestra experiencia como madres también contribuimos con nuestras profesiones en los campos de psicología, derecho, comunicación audiovisual, educación social, educación infantil, empresariales y educación perinatal. Además algunas tenemos formación como asesoras de lactancia.

Estamos repartidas por el territorio nacional e Italia: Asturias, Gipuzkoa, Madrid, Ciudad Real, Jaén, Murcia y Bologna. Nos conocemos casi todas en persona, y está situación descentralizada la coordinamos y trabajamos a través de distintas herramientas de internet.

Vuestra carta de presentación nada más entrar en la plataforma es:
«Luchamos por una lactancia informada y mejores medidas de conciliación familiar y laboral. Queremos que la salud y las personas estén por encima de los intereses comerciales»
En el siglo XXI ¿por qué creéis que debemos “luchar” tanto para que llegue esa información?
¿Habéis tenido la sensación de haber perdido alguna batalla en esa lucha?
Se plasman más las pérdidas que las ganancias, ¿puede ser que se perpetúe esa sensación derrotista que llevamos dentro las que estamos en esto de proteger la lactancia materna?

Pues es que parece que la maternidad se ha desnaturalizado, incluyendo la lactancia. Es muy común oír “yo no me complico, le doy biberón”, “se crían igual”, “mi hijo es de biberón y no le ha pasado nada”,… Y esto es una clara falta de información de esas madres -y, ojo, sabemos que hay madres que eligen desde la información y por supuesto han de ser respetadas-.
Sin embargo, como publicamos en nuestra web hace poco, en pleno siglo XXI las cifras están ahí y nos dicen que:

  • Actualmente a nivel mundial el biberón le va ganando a la teta.
  • Hay países donde la creencia mayoritaria es que dar el pecho es un “atraso”.
  • Las empresas de alimentación artificial infantil siguen invirtiendo sumas millonarias en publicidad para convencernos de que sus productos son igual o mejor que la lactancia materna.
  • Existen muchos profesionales de la salud que siguen difundiendo falsos mitos y dan consejos erróneos sobre lactancia.
  • Siguen existiendo muchos prejuicios y rechazo social hacia la lactancia en público o a niños mayores de un año.

Siempre que se lucha por algo hay momentos en los que parece que la lucha no vale para nada. Sobre todo cuando nos enfrentamos a grandes multinacionales o nos encontramos con profesionales sanitarios mal informados, incumplimientos de la ley de forma deliberada,…

Y luego la imagen que la sociedad ha creado de las madres que dan el pecho no es muy buena. Solo por luchar por la lactancia, estar informadas, dar el pecho en público o situaciones similares, recibimos calificativos como “talibanas de la teta”.

Sin embargo, nosotras no tenemos sensación de pérdida en esta lucha. Al contrario, creemos que hemos conseguido muchas cosas desde que creamos esta iniciativa y esperamos conseguir muchas más.

A veces, por lo general, no se gana la guerra en estos temas de Salud sabemos que existen «spoilers» o “destripadores” (por llamarlos de alguna manera) que desacreditan en todo su concepto el trabajo que se hace para protegerla, pero aún así si que se ganan las pequeñas batallas, que pueden hacer que haya o exista un giro con respecto a esa protección de los derechos del niño a ser lactado, ¿qué sentís cuando por poco que sea se consiguen esas pequeñas victorias?
Sentimos mucho orgullo. Cuando el Hospital de Castellón y el Comité de Lactancia se posicionaron a favor de la Plataforma en el caso del pediatra fue una gran victoria.

También es muy alentador cuando presentamos denuncias a webs, marcas, ayuntamientos, asociaciones,… que están violando la normativa de alguna forma y rápidamente corrigen su error.

Y, por supuesto, cuando las mamás nos escriben a diario para darnos las gracias por nuestra labor, o para agradecernos lo que les hemos ayudado dándole información, cuando nos piden ayuda para poner reclamaciones, cuando nos recomiendan a sus amigas mamás,… etc. Todas esas pequeñas cosas son nuestras grandes victorias de cada día.

Para acabar con la entrevista y puesto que os gusta recoger información sobre aquello que se cuelga, se dice, sucede o se escribe sobre la lactancia ya sea información veraz o no, y hacer vuestra aportación personal.
Hace unos días en la sección de Salud de El País (Buena Vida) la periodista María Sánchez Sánchez escribía un artículo, donde el titular decía: Componentes de las leches infantiles que asustan a los padres y no son para tanto –No se deje llevar por el miedo que provocan los términos abstractos y poco claros de las etiquetas-
Una vez leído este artículo ¿qué les sugiere? ¿Cabe echar más leña al fuego? ¿Qué futuro le predecís a la lactancia materna?

Nos sugiere que poco a poco se está fortaleciendo el cuestionarse con qué alimentamos a nuestros bebés, y esto es positivo. Estas noticias dejan en evidencia que la leche de fórmula es un producto que se tiene que vender, con unos intereses comerciales muy grandes por detrás, y que el despertar la conciencia de los padres supone un peligro para los índices de ventas de muchas empresas.

Desde la Plataforma valoramos no darle publicidad a este tipo de noticias porque consideramos que es hacerle marketing gratuito a dichas empresas. Durante estos dos años se nos han presentado noticias muy polémicas en contra de la lactancia materna y dejamos que caigan en el olvido por su propio peso y la energía la enfocamos en lo que realmente tiene valor: información veraz sobre lactancia materna, el conocimiento de la existencia del Real Decreto 867/2008, de 23 de mayo, por el que se aprueba la reglamentación técnico-sanitaria específica de los preparados para lactantes y de los preparados de continuación, el Código de Comercialización de Sucedáneos que España se comprometió a cumplir, profesionales actualizados en esta materia…

Somos conscientes del impacto comercial que tienen las campañas de marketing y el daño que crean en la sociedad, aún así, vemos que la lactancia materna, al menos en nuestro país, está volviendo al lugar de donde nunca debió salir, de los hogares. Del calor y la naturalidad de las casas donde se criaba sin cargas de consumismo, sin dudas entre alimentar de una y otra forma porque no olvidemos que, no hace tanto que no existía la leche de fórmula y lo normal era dar el pecho.

Así lo muestra la siguiente foto datada en los años 50. Donde podemos ver a una mujer entre varios hombres de una banda de música, dando el pecho sin que nadie la señale, ni la miren siquiera, porque era lo normal y así confiamos en que volverá a ser, lo normal.

plataforma lactancia informada - foto historica

Muchísimas gracias,
Con ganas de impregnarnos durante el congreso esa fuerza, vitalidad que emanáis y aprender de vuestra experiencia.

Entrevista a Míriam Casan, publicista

Míriam Casan participa en el XIV Congreso FEDALMA 2017 en la Mesa Redonda Comunicación profesional, también en lactancia.

miriam casan revisada

“Cuando vi el vínculo que se establecía con la lactancia…… aluciné”

Míriam Casan es licenciada en Comunicación Audiovisual por la Universitat Autònoma de Barcelona, especializada en Diseño y Producción por Elisava, la Escuela Universitaria de Diseño e Ingenieria de Barcelona. En continua formación en Márqueting y Publicidad Digital. Se dedica al sector de la Publicidad y el Diseño desde 2006 y desde 2012 está certificada como a Miembro Cualificado de Google AdWords, Bing Ads i Google Mobile Experts. Actualmente, trabaja como Senior PPC Account Manager en Polièdric, Agencia Partner Premium de Google. Madre de una niña amamantada.

Entrevista

Tu día a día, laboral, poco tiene que ver con la lactancia. A nivel personal, ¿cuándo empieza tu relación con la lactancia? ¿Recuerdas algún momento importante o que te haya quedado grabado?
Mi relación empieza cuando mi hermana fue mamá, hace 9 años, yo en aquel momento tenía veinti-pico años y no me había planteado la maternidad aún. En aquel momento … aluciné. Aluciné con el vínculo que se establecía. Y de alguna manera creo que en ese momento me plantee que quería ser mamá y que querría intentar la lactancia.
A parte de ese momento inicial, luego cuando he sido madre, evidentemente he tenido muchos recuerdos preciosos que me han marcado. Cuando eres mamá y tienes la suerte de dar el pecho a tu bebé, te das cuenta de que, si superas todos los baches que te vas encontrando, al final la experiencia es fantástica.

En tu día a día, ¿contribuyes de alguna manera a apoyar o promocionar la lactancia? ¿De qué manera?
Pues no es que pueda decir que haga ninguna acción en concreto, ni participe de actividades determinadas, pero sí que es vedad que con mi experiencia intento transmitir lo positivo que he vivido, y así motivar y ayudar a otras madres de mi entorno.

¿Qué es lo que más te ha impresionado positivamente de la lactancia? ¿Y negativamente?
Sé que es un tópico, pero sin duda, el vínculo que se ha establecido entre mi hija y yo. Dentro de unos meses voy a volver a ser madre, y sin duda espero repetir la experiencia, siendo consciente que con cada bebé la experiencia será diferente, pero seguro igualmente positiva.
Desde un punto de vista negativo, sin afectarme realmente, creo que por mucho que te cuenten o leas, te encuentras afrontando la lactancia tú sola. Tienes que aprender a ser mamá; aprendes de tu hijo, de ti misma, te encuentras con dificultades, y si confías mucho en ti misma y en tu hija, sabes a qué puerta llamar (donde te hagan ver que a pesar de las dificultades las cosas van a ir bien), a partir de allí conseguirás disfrutar de la lactancia. Aprendes a ser mejor persona, mejor mamá y te sientes feliz.

¿Qué harías para que a todos los bebés se les respetara el derecho de poder recibir el mejor alimento: la lactancia materna?
A nivel personal, lo que haría sería seguir haciendo lo que hago, transmitir mi experiencia positiva con la esperanza de poder ayudar a las personas que la reciban.
A nivel profesional, lo que haría sería intentar de ayudar a diseñar estrategias de comunicación y publicidad para vehicular ese mensaje de la mejor manera posible. Es difícil porque si quieres que esas estrategias sean efectivas implican un coste, y ello es complicado sobretodo por la situación que vivimos actualmente.

No podemos dejar en el tintero una pregunta que se ha ido enhebrando poco a poco mientras hablábamos. Te llegó un mensaje que te alucinó con el nacimiento de tu sobrino, te enamoró tu hija a pesar de las dificultades, dices que te ha hecho ser mejor persona y más feliz. Como publicista en un mundo de nuevas tecnologías, ¿qué debería decir, transmitir, comunicar, una campaña o un mensaje en pro de la lactancia materna para llegar al mayor número de personas posibles?
Las campañas pro lactancia que me han llegado están siempre enfocadas a los derechos y beneficios de la lactancia para el bébé; pero nunca hablan de nosotras, de las mamás ¿Cómo beneficia la lactancia a las mujeres? Para mi es obvio que la mayoría de las madres tiene como prioridad a su hijo y garantizar su bienestar. Pero justo el momento en el que eres madre por primera vez es un momento muy delicado. Sientes que tu “yo” pasa a estar en tercer plano, se mezclan muchos sentimientos, felicidad pero también vulnerabilidad e inseguridad. Y es por eso que propondría reenfocar la estrategia actual y tratar de llegar y motivar a las futuras madres contándoles los beneficios y ayudas para ellas.

Entrevista a Assumpció González Mestre, creadora del programa Paciente Experto Catalunya

Assumpció González participa en el XIV Congreso FEDALMA 2017 en la mesa redonda Atención centrada en la persona, también en lactancia.

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“Los grupos de apoyo a la lactancia deberían hacer lo posible para incorporarse en el mapa de activos comunitarios, sanitario y social que en la actualidad se está implementando en diferentes Comunidades Autónomas”

Assumpció González es licenciada en enfermería por la Universidad de Barcelona, ha realizado Máster en Comunicación Empresarial y Tecnologías Digitales IDEC por la Universidad Pompeu Fabra, y Máster en Dirección de Instituciones Sanitarias por la UAB. Miembro del núcleo central del Programa de Prevención i Atención a la Cronicidad (PPAC) y miembro del Comité Operativo del Plan Interdepartamental de Atención e Interacción Social y Sanitaria (PIAISS), del Departament de Salut de la Generalitat de Catalunya. Ha sido galardonada con la Medalla Trueta 2015 al Mérito. Y sobre todo, por lo que la invitamos a nuestro congreso, es creadora y directora del Programa Paciente Experto Catalunya, y vicepresidenta de la red de escuelas de salud para la ciudadanía del Ministerio de Sanidad, servicios sociales e igualdad.

Entrevista

A nivel profesional tienes 2 grandes campos de experiencia que pensamos pueden ser de gran interés para las asesoras de lactancia y las propias madres lactantes (incluso para sus familias). El primero como conocedora y promotora de la atención centrada en la persona, y el segundo como creadora y directora del Programa Paciente Experto Catalunya. Para ti, la persona es, sin ningún tipo de duda, quien ha de tomar las riendas de su salud (y enfermedad cuando sea necesario).
Sin duda alguna y desde mi punto de vista la persona es quien ha de tomar las riendas de su salud. En este sentido los profesionales hemos de ser capaces de realizar un cambio en nuestra manera de actuar y relacionarnos con la persona, pasando de un modelo paternalista a un modelo deliberativo. Este cambio se produce cuando los profesionales generamos una relación de confianza con la persona a la que atendemos, promoviendo que esta, a partir de sus conocimientos , experiencia y vivencias, y respetando en todo momento sus valores y preferencias, tome la decisión más adecuada para resolver aquellas situaciones o cambios que se produzcan en el proceso de salud/enfermedad a lo largo de su vida, acompañándolo en todo momento cuando sea necesario y así nos lo solicite.

En tu experiencia, ¿cuánto crees que tarda una persona, de las que viven en nuestra sociedad (que venimos de una medicina paternalista del todo) en ser capaz de tomar las decisiones pertinentes cuando recibe una información de impacto emocional?
Desde mis 10 años de experiencia desarrollando el Programa Paciente Experto Catalunya® y habiendo conocido y tratado con muchas de las personas que han participado en los diferentes grupos del programa, puedo afirmar que cada persona comprende e interpreta la información que le trasmitimos los profesionales, familias o amigos, de forma diferente. En cuanto a los profesionales en particular, hemos de ser capaces de adaptar al máximo, frente a un cambio que se produce en la vida de una persona entorno a su salud o enfermedad, la información que le transmitimos y como se la transmitimos. De nuestra forma de actuar dependerá en gran parte, por no decir en la totalidad de la misma, que la persona sea capaz de aceptar y tomar conciencia plena de qué le pasa y de esta manera esté preparada para tomar las decisiones pertinentes frente al cambio que se ha producido en su vida, ofreciéndole nuestro acompañamiento y respetando en todo momento sus valores y preferencias.

Como experta (creo recordar que el programa paciente experto, en sus 10 años, ha dado formación a más de 7000 personas en Catalunya) en grupos de apoyo entre pacientes/personas; ¿nos puedes dar algún consejo para ser más visibles en el medio sanitario, social y comunitario?
Desde mi experiencia a lo largo de estos años, mi consejo sería, como asociación sin ánimo de lucro y que formáis parte de un activo de la comunidad, incorporaos en el mapa de activos comunitarios sanitario y social que en la actualidad se está implementando en diferentes Comunidades Autónomas. El ser visibles como tal en dicho mapa hará posible y factible el daros a conocer a toda la comunidad y que se conozcan de primera mano las actividades que lleváis a cabo y de las cuales pueden beneficiarse las personas y sus familias en particular, y la sociedad en su conjunto.

Muchísimas gracias
Esperamos ansiosas tus aportaciones durante el congreso.

Entrevista a Sebastià Santaeugènia, Doctor por la Universidad Autònoma de Barcelona

sebastia santaeugenia revisadaSebastià Santaeugènia participa en el XIV Congreso FEDALMA 2017 en la mesa reconda Atención centrada en la persona, también en lactancia.

“La lactancia es salud”
“En las relaciones con los agentes implicados en los planes de salud, es importante acudir con un discurso transparente, claro y unificado desde las diferentes asociaciones de lactancia, tanto a nivel local como nacional”

Sebastià Santaeugènia es licenciado en Medicina y Cirugía por la Universidad Autònoma de Barcelona (UAB), especialista en Medicina Interna, Máster en Gerontología Clínica y en Dirección de Instituciones Sanitarias por la UAB, doctor en Geriatría. Actualmente es el director del Programa de Prevención y Atención a la Cronicidad (PPAC) del Departament de Salut de la Generalitat de Catalunya y miembro del comité operativo del Programa Interdepartamental de Atención e Interacción Social y Sanitaria de la Generalitat (PIAISS). Corredactor de la narrativa catalana de Atención centrada en la persona en el sistema de salud y su marco de evaluación. Padre de cuatro hijos amamantados.

Entrevista

¿Qué puntos crees que son interesantes de tu experiencia en la Atención Centrada en la Persona (ACP) para transmitir a asesoras de lactancia y madres lactantes en tu ponencia?
Hay que pasar, si creemos que la persona es el eje de atención, de la medicina basada en evidencia a la medicina basada en los valores y preferencias de las personas.
Las asesoras o madres que utilizan el sistema sanitario tienen el derecho de exigir que la mejor decisión para con sus hijos amamantados y su salud se base no sólo en la evidencia científica y en la experiencia del profesional que las atiende, sino que contemple también sus valores, voluntades, creencias, preferencias y experiencias.
En este cambio de época en la que pasamos de un modelo relacional paternalista a uno deliberativo, es necesario que el profesional y la persona sean capaces de compartir conocimientos como expertos que son desde su distinta perspectiva de la misma situación o problema.

Como profesional experto en el modelo ACP, ¿Cuánto crees que tarda una persona en ser capaz de tomar una decisión en su salud una vez recibe una información de impacto emocional? Y, ¿crees que las decisiones serían más fáciles si se hubieran trabajado desde la más tierna infancia?
El tiempo que necesitará una persona para la toma de decisiones dependerá de varios factores.
A nivel profesional dependerá de cómo da el profesional la información (lenguaje que usa, espacio donde la da, si individualiza la información o es genérica). Si todo es adecuado (y centrado) a la persona ésta tendrá elementos para aceptar la información más rápido.
Por parte de la persona dependerá de si la información puede tener un alto impacto emocional, si cumple con las expectativas que se había formado previamente, y de elementos como su formación previa, si está informada sobre qué significan los datos que se le facilitan o no…
La adquisición de hábitos saludables, así como la alfabetización en salud, que hace referencia a las habilidades sociales y cognitivas que hacen que una persona pueda acceder, entender y utilizar la información de forma que le permita promover y mantener una buena salud, son elementos claves a trabajar ya desde la infancia, para poder llegar a una edad adulta donde, a pesar de no contactar con el sistema sanitario estar capacitado en la toma de decisiones.

En julio de 2016, El Butlletí Oficial del Paralament de Catalunya aprobó la resolución sobre lactancia materna. El punto número 1 dice que el Parlament insta a la Generalitat a crear un comité de lactancia materna formado por miembros de los departamentos implicados, entidades y profesionales, tal como define la Declaración de Innocenti en 1990; ha llovido mucho desde entonces.

¿Cuál puede ser el motivo por el que las asociaciones prolactancia sean tan poco interesantes en las políticas de salud?
No es una pregunta fácil de responder, pero seguramente hay diferentes factores que han hecho que en nuestros días no se le de a la lactancia materna la importancia que ha de tener.
Factores como la presión por parte de la industria farmacéutica, de alternativas a la lactancia que se suponen son igual de efectivas o eficaces, o concepciones sociales cambiantes (como puede ser el hecho de dar el pecho en público, la “incompatibilidad” con la lactancia y la incorporación al mundo laboral), podrían ser alguno de los puntos que interfieran.

Dado tu cargo a nivel sanitario en Catalunya, nos atrevemos a preguntarte (corrígenos si estamos equivocadas) ¿por qué crees que las asociaciones prolactancia tienen menos fuerza que asociaciones contra el cáncer, el Alzheimer o la fibromialgia?
Es cierto que la preocupación en el mundo de los sanitarios respecto a enfermedades es superior que a las “no enfermedades” (concepciones de la salud), y evidentemente las asociaciones que se preocupan de personas que tienen patologías encuentran un punto de apoyo importante en aquellos profesionales especializados en atender esas enfermedades. Respecto a las asociaciones que defienden la lactancia materna (una condición de salud) probablemente no encuentran detrás los mismos profesionales con el mismo interés por mantenerla.

Nosotras somos asociaciones sin ánimo de lucro ni conflicto de intereses, que con experiencia propia pretendemos defender los intereses de lactantes, madres y familias. Desde la dirección general de planificación en salud, donde estás ubicado, con la ACP como pilar fundamental para dar atención, dais gran importancia a las asociaciones de personas y al voluntariado como agentes implicados en esa atención integral e integradora del sistema de salud. Algún consejo para ser más visibles en el medio sanitario, social y comunitario.
Todas las asociaciones de “pacientes” deberían buscar el máximo beneficio para sus asociados; desde el punto de vista de los grupos de apoyo a la lactancia materna, la presencia a nivel de las esferas donde se hace la planificación de las políticas de salud, es necesaria para dar a conocer los objetivos de dichas asociaciones. Es importante conseguir reunirse con el mayor número de personas para sensibilizar sobre este hecho, con un discurso transparente, claro, objetivo, que elimine los prejuicios que puedan existir en contra de las asociaciones prolactancia materna, y que ese mismo discurso con esos objetivos sea común en todas las comunidades, provincias, regiones, a nivel nacional e internacional, porque un discurso único cohesiona mucho el impacto sobre los diferentes actores implicados.

Entrevista a Marta Rabasa

marta rabasa¿Cómo fue que decidiste participar en el concurso?
Me apasiona el diseño gráfico y me gusta encontrar nuevos retos que me motiven a seguir trabajando en este campo. De cada creación aprendo algo diferente y en ésta he tenido la oportunidad de desarrollar mi faceta cómo ilustradora.

¿Qué te motivó de un concurso para ilustrar aspectos de la lactancia materna?
En ese momento acababa de tener a mi segunda hija. Experimentar una reciente maternidad te motiva y te hace tirar hacia delante cualquier proyecto.

¿Tienes experiencia personal o cercana con la lactancia materna?
Sí. Con mis dos hijos he probado la lactancia materna y mi experiencia ha sido breve pero maravillosa. Durante ese periodo he experimentado un vínculo muy fuerte con ellos, lo recuerdo con mucha ternura.

¿Conoces los grupos de apoyo a la lactancia materna?
Sí. Tuve la oportunidad de asistir a alguna sesión de apoyo después de dar a luz a mi primer hijo, ya que tenía muchas dudas sobre cómo amamantar: sí el agarre del bebé era el correcto, sí se quedaba con hambre, porqué sentía dolor, etc. Me ayudaron a sentirme más segura y a estar más informada sobre qué poder hacer.

¿Qué te inspiró del lema “lactancia materna: rompiendo etiquetas”?
Su veracidad. Hay que tratar la lactancia materna cómo lo que es, algo natural. Hemos de vivirlo como una experiencia más que la maternidad nos ofrece, algo único que sucederá pocas veces en nuestras vidas y de lo que no debemos privarnos sentir. En definitiva, se trata de seguir “dando vida” a nuestros bebés y de seguir recibiendo su conexión.

El jurado valoró positivamente la modernidad y estilismo de la imagen. También el hecho de que la composición no estuviera abarrotada sino que respirara dejando espacios para los textos ¿qué piensas de ello?
Estoy muy agradecida, no recibo un reconocimiento todos los días y valoro mucho que se aprecie el trabajo que hay detrás.
He intentado reflejar que la lactancia es un hecho actual y de tendencia. Como publicista sé que hay que tener en cuenta el público al que te diriges y el “producto” que comunicas, pero como madre también soy una diana más a la que apuntar, y creo que es eso lo que me ha hecho realmente conectar con el objetivo del concurso.

Sea cual sea el lema del Congreso anual, al concurso suelen presentarse muchas imágenes simples de bebés mamando. Más allá de eso, ¿Qué valores crees que aporta tu diseño al lema del congreso?
El concepto del cartel es la naturalidad y en torno a él giran todos los demás aspectos gráficos. Mi intención al crearlo era que cuando lo viese una madre le transmitiese que la idea de dar el pecho es la opción más natural que existe, es beneficiosa y socialmente aceptada.

Llama la atención el hecho de que le madre lactante luzca tatoos ¿Qué has querido comunicar?
Las flores refuerzan el aspecto de salud y de compromiso con el medio ambiente.

Tanto la madre como los bebés están casi desnudos, ¿Qué representa?
Que la lactancia materna ha de ser algo sin tapujos; algo real. También refleja el contacto, el vínculo, la conexión que se siente “piel con piel”.

Una postura curiosa la del bebé mamando, ¿Por qué la escogiste?
Si te fijas el lactante ya no es un recién nacido, es un bebé un poco más crecido. La idea es reflejar que la leche materna es el alimento ideal durante los primeros meses de vida del bebé.

Por otro lado, la postura llama a atreverse y conocer otras opciones, más allá de las extendidas en la actualidad.

En general tu cartel da la impresión de ser una imagen sencilla que sin embargo esconde más significados y contenidos de lo que parece a simple vista. ¿Estás de acuerdo? ¿Cuáles destacarías?
Exacto. Al tratarse de un cartel que no debía contener soporte textual, el visual debía concentrar todo el mensaje.

El principal significado que destacaría sería precisamente el lema del congreso “La lactancia materna. Rompiendo etiquetas”. Creo que el propio eslogan explica la necesidad de un cambio de perspectiva de la visión de la lactancia materna entre la sociedad.

¿Has ilustrado otras obras relacionadas con la lactancia? ¿Eres ilustradora profesional?
La verdad es que anteriormente no había tenido oportunidad de trabajar en un proyecto relacionado con la lactancia.

Soy Publicista y Relaciones Públicas de formación y actualmente trabajo como profesional de la comunicación para una editorial universitaria de Barcelona.

¿Qué otro tipos de ilustraciones has publicado?

Como diseñadora he participado en diferentes concursos y ganado alguno de ellos.

Como hobby he diseñado logotipos y carteles para diferentes concursos, y como profesional he producido diferente material publicitario para marcas de gran consumo del sector de la alimentación y del cuidado personal.

Actualmente, estoy centrada en la difusión y comunicación editorial, teniendo la oportunidad diseñar cubiertas de libros y material promocional, entre otras tareas de promoción.

Reconocimientos como éste me animan a seguir trabajando por mi cuenta en el diseño y a estar abierta a nuevas oportunidades.

Conoce más contenidos del Congreso Fedalma 2017

José María Paricio, Pediatra

José María Paricio participa en el XIII Congreso FEDALMA. A su cargo está la conferencia «La lactancia, un bien de todos. Código y leyes de protección».

“El código se incumple sistemáticamente, todos los días, por todas las compañías”

José María Paricio Talayero, Pediatra, doctor en Medicina y subdirector médico en el Hospital de Gandía. Además, es diplomado en Diseño y estadística en Ciencias de la Medicina y ha realizado 15 cursos de posgrado. Es creador de www.e-lactancia.org y fundador y presidente de la Asociación para la Promoción e Investigación científico-cultural de la Lactancia Materna (Apilam). Su amplia actividad docente y como ponente se centra en la lactancia materna, área en la que ha recibido varios premios de investigación. Es autor del libro ‘Tú eres la mejor madre del mundo. La crianza en los tres primeros años’.

JM Paricio

Entrevista

Usted viene a hablar de la protección institucional y legislativa de la lactancia. ¿Cuáles son los principales instrumentos?

Uno de los principales instrumentos es el Código internacional de comercialización de sucedáneos de leche materna, código de 1981 firmado entre la industria de alimentación infantil y organismos de salud como la OMS y otros defensores de buenas prácticas en alimentación infantil. Este código es un conjunto de reglas destinadas a proteger la lactancia materna de prácticas comerciales poco éticas. Su preámbulo declara que “la comercialización de los substitutos de la leche materna requiere un tratamiento especial que hace inadecuadas en el caso de esos productos las prácticas habituales de comercialización”.

El código obliga a aquellos países que, como España, lo han firmado. Prohíbe expresamente la promoción y publicidad de sucedáneos de leche materna, biberones, tetinas y cualquier alimento que se pretenda comercializar para antes de los 6 meses de edad.

Además existen directivas europeas, decretos gubernamentales en España (RD 867 de 2008) y declaraciones institucionales de las diversas comunidades autónomas que defienden la práctica de la lactancia. Aquí mismo, en Castilla-La Mancha, las Cortes hicieron una Declaración Institucional a favor de la lactancia a finales de 2005.

Finalmente hay todo un conjunto de protocolos, de guías de buena práctica, de normativa aconsejada por las diversas sociedades científicas (Pediatría, Ginecología, Matronas, Enfermería…) que declaran a la lactancia materna como el método de alimentación de excelencia para bebé, madre y sociedad.

¿Hay algún lugar donde denunciar las infracciones?

Es necesario primero conocer bien el código, que no es tan largo ni tiene tantos artículos, para poder saber qué, dónde y cómo se puede denunciar una infracción. Una publicidad indebida en un establecimiento o en un medio de comunicación o una oferta a bajo precio de fórmulas lácteas de inicio, por ejemplo, se pueden denunciar en la oficina del consumidor más cercana (casi seguro que hay que recordarles la existencia del Real Decreto 867 de 2008), pero esto, la publicidad indebida, no suele ocurrir en nuestro país, pues los fabricantes del sector saben la existencia de la ley y se cuidan de infringirla, al menos claramente, en este sentido.

Lo triste es que es en establecimientos sanitarios públicos y privados (hospitales, centros de salud, consultas y farmacias) donde más se incumple el código. Un cartel con propaganda, un calendario de una marca, un bolígrafo, un bloc de notas con la exhibición del nombre de una fórmula infantil, un paquete regalo en una maternidad o consulta de matrona que en su interior contenga publicidad indebida son hechos bastante habituales y muchas veces no denunciados. Muchos sanitarios no son conscientes de que están ejerciendo como agentes comerciales de las multinacionales del sector.

Se puede luchar contra estas infracciones dentro del ámbito sanitario, por medio de la queja. Vale la pena primero intentar hacerle ver al responsable (jefe, supervisor, coordinador o médico, enfermera o matrona directamente) la violación del código que eso supone (no nos debe sorprender que desconozcan su existencia). No obstante, agotada o no emprendida la vía anterior, según convenga o apetezca, siempre podemos recurrir a la hoja de reclamaciones del establecimiento en cuestión.

Existe un organismo internacional, la IBFAN (Red Internacional de Grupos pro Alimentación Infantil) que, entre otras muchas acciones que realiza, monitorea las violaciones del código y publica cada pocos años un informe, muchas veces accesible en Internet.

Este organismo y una parte de él, radicada en Reino Unido, Baby Milk Action, tienen formularios on-line en sus páginas para recoger las denuncias de particulares, ordenarlas, clasificarlas y realizar luego un informe. El problema es que su información en Internet está muy desordenada, repetida con páginas que funcionan mejor unas que otras y no está muy claro dónde escribirles. Una de las direcciones, www.ibfan-icdc.org contiene un formulario de encuesta breve en español dentro de su apartado Forms&APP.

Pero, ¿por qué es necesaria esa protección? ¿Se cumple actualmente?

La presión comercial de empresas multinacionales con intereses en la alimentación sigue jugando un papel importante para hacer que muchas mujeres decidan no dar pecho a sus hijos y que aquellas que sí lo hacen acaben pronto. Cada niño alimentado con lactancia materna exclusiva 6 meses supone unas pérdidas de 450 a 990 euros, según marca, a estas empresas: 1.000 niños amamantados les hacen perder entre 75 y 165 millones de las antiguas pesetas.

Por ello, invierten algo más del 10% de sus beneficios en publicidad a madres y público en general, sin contar la promoción que hacen entre la clase sanitaria, pediatras fundamentalmente, pues estas empresas utilizan claramente el sistema de atención de salud como canal de promoción de sus productos.

El código se incumple sistemáticamente, todos los días, por todas las compañías. Es preciso seguir divulgando su existencia y reclamando siempre que se pueda.

¿Qué importancia tiene esta legislación, estas herramientas? ¿Qué sería sin ellas? ¿Deberían ser más restrictivas, más flexibles…?

Son fundamentales. La lactancia no es enteramente un instinto, tiene parte de cultura transmitida y eso es mudable según intereses. La lactancia es universal pero no es una multinacional con un departamento de comercialización potentemente dotado. La lactancia, las mujeres y las niñas y niños del mundo quedan muy inermes ante la agresividad comercial de los fabricantes de sucedáneos, con potentes aparatos de promoción de sus productos. No podemos olvidar que la industria de la alimentación es, junto con la de armamento, una de las más poderosas del planeta.

Se deben tomar medias a nivel estatal. La lactancia es un tema de Salud Pública y debería ser un objetivo prioritario en los planes de salud. Se debería tratar con idéntico o mayor cuidado que los planes de vacunación. Y eso empieza por asignarle un presupuesto, diseñar campañas de información y divulgación y establecer indicadores que ahora no tenemos. Sin saber claramente de qué cifras de lactancia partimos, mal podemos evaluar la efectividad de las acciones que emprendamos.

Alguien con poder, y eso sólo lo tienen ministerios de salud por una parte y las organizaciones profesionales por otra (de médicos, pediatras enfermeras, matronas) han de hacer comprender claramente a los fabricantes que deben cumplir el código (a fin de cuentas son esos fabricantes los que lo firmaron en su día) y que no hacerlo tiene consecuencias.

Hay quien tacha esta protección de la lactancia como paternalista o que limita el poder de decisión de las madres. ¿Qué piensa usted al respecto?

Para nada, el código no obliga a ninguna madre a amamantar o dejar de hacerlo. El código simplemente está para proteger la lactancia e informar de cuál es la alimentación más adecuada de los lactantes para que alcancen el mayor nivel de salud y desarrollo. El código protege a consumidores y al personal de salud de presiones e influencias indebidas sobre el tipo de alimentación más saludable.

Este es un tema arduo pero ¿deben las asesoras y los profesionales conocerlo? ¿En qué medida?

Por supuesto que deben conocerlo. Deben leerlo y saber qué pone, que es muy sencillo y no tan largo. Bromeando puedo decir que casi es más corto el contenido que su título, ‘Código internacional de comercialización de sucedáneos de leche materna’, que es muy largo.

Existen versiones accesibles en Internet, basta buscar por el nombre y se obtiene fácilmente el pdf del Código completo. Vale la pena obtener la versión original de 1981 y una posterior de la celebración, 25 años después, en la que se dilucida la cuestión de los 6 meses de edad de exclusividad de la lactancia, ya que en 1981 aún daban por bueno “4 a 6 meses”.

En sus ponencias, entrevistas e intervenciones siempre aboga por que las madres y las familias se organicen por una defensa de la lactancia, por una mejor conciliación… ¿Qué puede hacer el ciudadano de a pie?

Es verdad que es fundamental que existan códigos y leyes y protocolos de sociedades médicas y de enfermería y otras que defiendan la lactancia, pero no podemos olvidar que todo este entramado protector que existe ha sido en su mayor parte debido a la presión de entidades ciudadanas, de grupos de mujeres que presionaron en su día para que la OMS y otras entidades se hicieran eco de ello. Si las mujeres nos esperan a los sanitarios para que arreglemos la lactancia, van dadas.

Hemos de recordar que la cultura de la lactancia hasta bien entrado el siglo XIX estaba anclada en el mundo de la mujer y que fuimos los sanitarios, médicos fundamentalmente, los que se la arrebatamos, la reinventamos tergiversándola enormemente con resultados finales catastróficos. Gracias a nuestros avances pretendidamente científicos hemos estado a punto de provocar la extinción de una cultura ancestral.

Me parece de lo más sensato del mundo que haya asociaciones, grupos de mujeres que tomen las riendas de la lactancia materna y nos expliquen a nosotros lo que saben hacer ellas mejor que nosotros, que es dar pecho; si hay algún problema médico ya nos consultarán y entonces sí que deberemos estar preparados para ser eficaces.

Pero es que además las mujeres harán bien en tener una desconfianza al menos pequeña, o precaución o espíritu crítico o como se le quiera llamar, acerca de lo que desde el mundo sanitario y otros mundos alternativos les intentan vender. No olvidemos que tomar parcelas de poder siempre ha sido muy productivo para el que las toma; de hecho, ese fue el motivo del rapto histórico de la lactancia a finales del XIX. Hoy eso es impensable a esa escala, pero otras amenazas van surgiendo.

Una es la medicalización de aspectos parciales de la lactancia y otra es la difusión de técnicas o tratamientos alternativos sin ninguna prueba de su eficacia. Y puedo nombrar desde la epidemia de frenillos que nos asola (que haberlos, haylos, pero la lactancia no es siempre una lucha contra el frenillo), pasando por la invención de tipos de mastitis que no existen en la literatura científica, como las subagudas o las subclínicas con el consiguiente uso y abuso de antibióticos y probióticos sin pruebas clínicas, hasta la difusión de dietas especiales y técnicas con escaso fundamento como osteopatía, cráneosacral, homeopatía y muchas más que intentan hacerse un hueco en el mundo de la lactancia.

Usted ha tenido mucho que ver con dotar a familias y profesionales de una de las herramientas más útiles de los últimos tiempos. Me refiero a e-lactancia. ¿Cómo surgió la idea y cómo se ha ido desarrollando? ¿Es suficientemente conocida, sobre todo por los profesionales?

En 1998 acabábamos de ganar el galardón de la Iniciativa hospital Amigo de los Niños (IHAN) de OMS-UNICEF para el Hospital Marina Alta (Denia, Alicante) y mucha gente, profesionales y madres nos consultaban muchas cosas, entre otras, sobre medicamentos que podían o no tomar las madres.

Descubrimos que todo lo que ponía al respecto en los prospectos era muy negativo (“no tomar este medicamento si se da pecho” o peor: “no dar pecho si se toma este medicamento”) y que además no estaba basado en ningún estudio. Descubrimos que había estudios científicos que probaban justo lo contrario. Que había medicamentos que no pasaban nada o muy poco a la leche y que eso no era peligroso para sus bebés. Con los datos que recogíamos de libros y artículos, nos hicimos un fichero en Access para uso interno e intentamos ponerlo en la intranet del hospital para poder consultarlo desde cualquier puesto de trabajo.

Había tantas restricciones de seguridad en los ordenadores corporativos de la Conselleria de Sanitat que el jefe de Informática del hospital nos propuso ponerlos en Internet, y ahí estamos. Tardamos poco en averiguar que además de nosotros muchas otras personas estaban mirando la página, por lo que decidimos cuidarla mucho con referencias científicas y actualizaciones constantes.

Durante tres años, en 2004 tuvimos apoyo económico de la Conselleria de Sanitat. Luego tras la quiebra técnica de la Comunidad Valenciana por el despilfarro de sus gobernantes, esto se acabó. Actualmente tenemos instituciones y grupos serios e importantes en el mundo de la Sanidad, la Salud Pública, la lactancia y la crianza que nos dan su aval científico, que confían en nosotros (la Liga de la Leche, la asociación de pediatras de México, la asociación de Bancos de Leche de España, la IHAN de España, la ABM (Academy of Breastfeeding Medicine), etc.

Con estos avales estamos buscando apoyo económico institucional. De momento para pagar servidores, traducciones y búsqueda bibliográficas recibimos donativos puntuales de los usuarios de la página. No nos sentimos solos, aunque sí necesitados y nos preocupa la continuidad, la sostenibilidad del proyecto.

El número de consultas que nos hacen anualmente de todo el mundo es impresionante, se cuenta por millones. Aun así es cierto que todavía quedan profesionales que no saben de la existencia de la página e-lactancia.orgTambién ha colaborado en el empoderamiento de muchas madres con su libro ‘Tú eres la mejor madre del mundo’, donde también habla de lactancia. ¿Qué encontrará quien lo lea?

Creo que nunca habrá suficientes oportunidades para decirle a una madre que se siente mal que lo está haciendo bien. Las madres suelen tener tal grado de autoexigencia y quieren tanto a sus hijos que con frecuencia creen que algo que han hecho mal es la causa que ha podido perjudicar a su hijo. Hay que convencerlas que el virus que tiene su bebé no tiene nada que ver con lo que hayan hecho ellas los días anteriores, que lo habría cogido igual o de otra manera si hubiese hecho cosas diferentes. Aún se sienten más culpables si la enfermedad es seria o aparecen problemas escolares o trastornos de conducta. Es cierto que la influencia de los padres es mucha, pero muchas enfermedades nada tienen que ver con lo que hagan los padres y la personalidad y desarrollo del niño tiene que ver con muchas cosas además de lo que hayan hecho los padres.

Haber visto a tantas madres atribuirse culpas de modo innecesario, me llevó a dedicar un capítulo entero a hablar de la culpa en el libro de crianza que escribí.

En determinadas corrientes de la psicología y de la crianza se tiende a atribuir a la madre un papel único y determinante en todo lo que les ocurra a sus hijos en el futuro, y eso no es cierto. Se les hace creer en un determinismo tal que viene a decir, simplificando, que si no lo abrazó o consoló bastante aquel día, por eso luego ha tenido los problemas que ha tenido. Estos agoreros que culpabilizan a las madres y casi no les permiten respirar olvidan que hay muchas oportunidades en la vida para corregir posibles errores, que los factores de todo fenómeno suelen ser múltiples y que existe una cualidad de los humanos llamada resiliencia, la capacidad de reponerse a la adversidad.

No soy filósofo, ni sociólogo, ni historiador, pero vivo en este mundo de raíces tan judeo-cristianas y hace ya unos 1.800 años que los Proverbios nos hacen soñar con la mujer hacendosa, de más valor que las perlas. Se ha esperado y se sigue esperando todo de la mujer. La mujer tiene deberes en muchas sociedades de toda ideología. Se espera que críe a los niños para que sean futuros ciudadanos de la patria, se espera que les amamante, se espera que sea buena esposa, buena amante, buena cocinera, buena madre. Esta quimera, aunque intelectualmente esté rebatida, ha hecho poso en los hombres de hoy y, lo que es peor, en las mujeres de hoy. Aunque muchas de las actitudes de ese “ser perfecta” están abolidas intelectual y emocionalmente, hay un fenómeno al que he asistido estos años de profesión: la práctica generalización de la idea de una híper-responsabilidad, véase culpa, en las relaciones de las madres con sus hijos, es decir, el pensar que tienen que ser perfectas en este tipo de relación.

Es cierto que puede ser una reminiscencia de la idea bíblica de mujer hacendosa, pero también lo es que diversas corrientes del pensamiento posterior, incluido el psicoanálisis, al menos el inicial, culpabilizan a las madres. También ciertas derivas de la teoría del apego le atribuyen a la madre un papel casi excluyente en la crianza que puede ser muy perturbador para la mujer y mucho más aquí y hoy, como dice Carolina del Olmo en su esclarecedor ‘¿Dónde está mi tribu? Maternidad y crianza en una sociedad individualista’.

Además, pienso que hay una fragilidad especial en las relaciones entre madre e hijo debido a fenómenos innatos, biológicos y que superan a los del padre o pareja. El recién nacido está preparado para enamorarnos, para vincularnos a él y, aunque es capaz de lograrlo con cualquiera de los que están por allí, la más sensible, la que más lo va a notar es la persona que lo ha engendrado y llevado nueve meses dentro de ella. Está ya muy sensibilizada. Si además de engendrarlo, le da pecho, qué quieres, eso acelera la vinculación.

Muchas madres sólo con oír a sus hijos se notan subidas de leche y tienden a cogerlos más en brazos. Y aunque rehúyo las teorías de la vinculación obligatoria única y exclusivista entre madre e hijo, es cierto que los primeros meses este apego es normalmente el más fuerte de los que puede establecer un bebé con un adulto.

El título que había pensado inicialmente era muy aburrido: ‘Estrategias de madres’. Pero luego pensé que la última frase del libro en realidad era la mejor: “Tú eres la mejor madre del mundo”. En efecto, para cada bebé, su mamá es la mejor mamá del mundo. ¿Quién está sacando el mundo adelante? ¿Cómo sobreviven muchos niños en los países pobres? ¿Quién concilia aquí? Las madres. Y pese a eso viven con una especie de culpa perpetua.

Su actividad divulgativa y formativa se centra en su mayoría en la lactancia materna. ¿De dónde viene su interés?

Mi primer contacto con la lactancia ocurre cuando mi mujer amamanta a nuestros tres hijos. Esto ocurre en un momento, finales de los 70, en que pocas mujeres amamantaban y no había referencias familiares ni de amistades. Además yo venía de acabar Medicina y no tenía ni idea de lactancia. Y cuando digo ni idea es exactamente así: ni idea. Observé fundamentalmente lo bonito que era, también que podíamos ir de viaje y de camping sin ningún problema, Christine lo llevaba todo en ella y yo la veía muy guapa y orgullosa de ella misma. Es cierto que nuestros hijos no padecieron ninguna enfermedad los primeros meses de su vida, pero eso no me llamó la atención; como digo, la lactancia me entró por la estética.

Posteriormente, haciendo la residencia de Pediatría en el Hospital La Fe, de Valencia, nadie nos hablaba de lactancia salvo una pediatra, la doctora Ana Muñoz, que se paraba a hablar con las mujeres en la maternidad y si estabas atento podías aprender mucho con ella. Aprender, por ejemplo, algo tan obvio como que la lactancia es importante para muchas mujeres.

Posteriormente, a los pocos años de profesión constaté que los bebés amamantados enfermaban mucho menos que los no amamantados. Y era muy evidente y muy sorprendente. Lo que yo veía en el día a día estaba publicado en multitud de artículos de revistas científicas. Y en la facultad de Medicina habían omitido ese dato (eso sí, me hicieron aprender de memoria cuántas micras mide exactamente cada virus y bacteria existente, cosa que nunca me ha servido para nada).

Todo ello me hizo leer cada vez más publicaciones que tuviesen que ver con la lactancia y vi que era todo un mundo valiosísimo y que ni yo ni mis compañeros estábamos preparados para ayudar a una mujer que tuviese un problema concreto de lactancia. Y junto a mis compañeros del Hospital Marina Alta de Denia, a mediados de los 90, decidimos aprender lactancia. Más vale tarde que nunca.

Irene García, Bióloga

Irene García participa en el XIII Congreso FEDALMA dentro de la Mesa Redonda «la mujer lactante hoy». Su ponencia trata del «Lactancia y empoderamiento femenino».

“Gran parte de la violencia contra la mujer se articula en torno a la maternidad”

Irene García Perulero es bióloga molecular, feminista, lactivista y activista del parto respetado, así como experta en violencia obstétrica. Es una activa bloguera desde 2002, comunicadora y escritora. Asimismo, es coautora de ‘Una nueva maternidad’, codirectora de Cangurosymas.es, cocreadora de ‘Infancias Libres’ y ‘Ni putas ni princesas’. Madre y creadora de ‘La maternidad y el encuentro con la propia luz’. Colabora con Cuaderno de Valores de Educo, Pedagogía Blanca, Mujeres Empoderadas y Asesoras Continuum.

Irene García Perulero

Entrevista

En el XIII Congreso Fedalma Irene hablará sobre feminismo y lactancia. ¿Qué visión hay desde el feminismo (o los feminismos) de este fenómeno?

Dependiendo del feminismo que estemos hablando. Al feminismo de la igualdad le parece un retroceso y una vuelta al pasado. Las feministas de la igualdad piensan que es una esclavitud y un sacrificio enorme, que para eso están los biberones, y en la corresponsabilidad desde el minuto cero con el progenitor masculino. Piensan que da lo mismo dar teta que biberón. Este es el feminismo oficial, institucional, el que más se oye. Hay otras que nos consideramos feministas y no tenemos esa visión. No sé si nos ubicamos en algún tipo de feminismo (el ecofeminismo, el feminismo de la diferencia…) aunque yo voy por libre. Hay muchas asociaciones de lactancia materna y las asociadas se consideran feministas.

¿Hay cierto enfrentamiento? ¿Estas posturas pueden convivir?

En teoría deberíamos poder convivir, porque el feminismo habla de libertad de elección. El feminismo lucha por que las mujeres tengan los mismos derechos que los hombres, pero esto al final tiene que ver con la libertad de elección. La lactancia tiene que ser algo voluntario; si no quieres, va a fracasar, porque para que una lactancia no fracase la mujer tiene que querer dar teta. De otra manera, no saldrá adelante. Tiene mucho que ver con la sexualidad femenina y, por ello, para mí debería ser un tema que el feminismo protegiese con mucho ahínco: el derecho a dar el pecho y a disfrutar una parte de la sexualidad que, además, nada tiene que ver con los hombres y que es propia de las mujeres. Las mujeres que dan el pecho se encuentran con muchas dificultades. Ambas posturas deberían ser compatibles. No dar teta es una elección tan válida como darla.

Esto tiene mucho que ver con la figura de la mujer en el ámbito laboral. ¿Qué proponen unos feminismos y otros al respecto?

El feminismo de la igualdad propone bajas paternales iguales e intransferibles para los padres, pero el problema es que es muy corta. En otros países son largas y da igual la parte que se pueda transferir, mientras que en España solo tenemos seis semanas de baja intransferible y el resto se puede transferir. Ellas argumentan que la maternidad es lo que nos impide acceder al mercado laboral. A mí me parece un argumento falaz: lo que nos impide entrar al mercado laboral es el mercado laboral, que nos discrimina. Pero no la maternidad. Es igual que decir que nos violan por llevar minifalda, es culpar a la víctima de la discriminación que sufre.Los responsables de la discriminación son quienes nos discriminan y para eso hay que hacer leyes que nos protejan a nosotras y al derecho a la lactancia y a todo aquello que se deriva de nuestro papel en la reproducción, que es claramente diferente al del hombre. Negar esto es negar la biología.

¿Tiene que ver la lactancia con el empoderamiento femenino?

Cuando consigues una lactancia exitosa, te empoderas. Ocurre porque hay mecanismos neurológicos que lo favorecen, ya que la lactancia dispara los centros de recompensa. La mujer que no consigue dar pecho es por distintas interferencias externas. Atacar la lactancia es una manera de desempoderar a la mujer muy efectiva. Es una de las violencias de género más sutiles y difíciles de detectar.

¿Al igual que la violencia obstétrica?

Una mujer que da el pecho está muy emancipada, también de la industria de la alimentación infantil. Las mujeres que hoy dan el pecho tienen recursos socioeconómicos altos, son gente preparada. Antes eran las pobres y ahora son las ricas, porque dar teta es muy difícil y hay muchos obstáculos, desde que te separen en el momento del nacimiento a que el pediatra no utilice las tablas de la OMS. No creo que sea de manera consciente, pero sí está tan normalizado y aprendido que creemos que los cuerpos de las mujeres son defectuosos y no pueden parir ni dar teta. Nos lo han machacado tanto que nos lo creemos: nosotras, las madres, los pediatras, etcétera. No es algo consciente, pero la consecuencia final es que se la desempodera porque cuando tu cuerpo no hace lo que se supone que tiene que hacer, te sientes mal.

¿Cómo se lucha contra esto?

Las redes de mujeres de apoyo a la lactancia son las que van a cambiar el mundo. Son las que colaboran en estos activismos pacíficos, sin ningún tinte violento, cuyas reivindicaciones son tranquilas, asertivas y poco agresivas. Hay que seguir apoyando a las mujeres que quieran acercarse, seguir informando utilizando las redes, porque ahora la capacidad de amplificar la información es mucho más grande que antes, cuando todo era de tú a tú y con poco alcance. Hay que seguir formando redes de apoyo, que son imprescindibles no solo para conseguir lactancias sino para cambiar el mundo.

¿Los medios de comunicación buscan enfrentar a esos dos tipos de madres? ¿En el mundo 1.0 también existe esa contraposición, ese enfrentamiento?

La mayoría de la gente con la que hablo no ha dado teta y no pasa absolutamente nada. Es un tema que se trata de vez en cuando, sobre todo al principio y siempre desde el respeto. Nunca he visto ninguna pelea en el parque sobre ello. El problema de Facebook es que es un patio de vecinos y queda todo escrito, lo cual es un peligro porque lo que se habla en la puerta del colegio se lo lleva el viento. La guerra de madres es bastante artificial y, a la hora de la verdad, a la gente le importa bastante poco. Lo que más me ha sucedido cuando daba de mamar era que algunas mujeres me contaban con pena por qué no había podido dar pecho, con los típicos mitos. No lo hacían desde ninguna trinchera, sino como desahogo. He tenido ocho años de lactancia y solo una vez me han mirado mal.

¿Cómo llega a interesarse por estos temas? ¿Ser bióloga tiene algo que ver?

Tuve un parto horrible con mi primera hija y di con El parto es nuestro. Un ginecólogo me dijo que la oxitocina sintética era igual que la natural y me puse a buscar, porque era bióloga y quería investigar. En eso sí sirve mi carrera porque interpreto los estudios científicos de diferente manera. Desde el punto de vista de una bióloga, el funcionamiento del cuerpo y la mente humana es espectacular, aunque soy bióloga molecular. Pero el desencadenante fue un parto desastroso. Yo antes era feminista de boquilla: pensaba que teníamos todo conseguido y ahora he visto que, en los temas de reproducción y maternidad, hay una gran violencia.Gran parte de la violencia contra la mujer se articula en torno a la maternidad.

¿Quizá la más invisible?

Todavía nos queda hasta que la violencia obstétrica sea entendida como lo que es, porque ahora está muy normalizada y se considera normal que te hagan episiotomía o Kristeller; de hecho, vas al parto esperando que te lo hagan. En las preparaciones al parto no se habla de otras opciones y aún son minoría quienes quieren partos naturales, aunque cada vez más. En otros países ya hay leyes, en Argentina y Venezuela, y se llegará a eso. Cuando esto se consiga, podremos decir que interferir en la lactancia también es violento porque también es una parte de nuestra sexualidad.

¿Hacia dónde debe ir el feminismo?

Creo que reivindicar los derechos sexuales no puede quedarse en permitirnos abortar de una manera higiénica, que es lo que acepta el feminismo. Probablemente es una reivindicación que hay que hacer, el derecho a decidir sobre maternidad y la información sobre anticonceptivos, pero hay otra vertiente clara: las mujeres somos las que parimos y para que la especie siga existiendo hay que seguir pariendo. Proteger nuestros derechos reproductivos tiene que ir más allá del derecho a no tener hijos, sino del derecho a tenerlo y criarlos libremente en buenas condiciones. La lactancia no es una obligación moral, sino un derecho. Si las feministas que hay ahora en los cargos públicos no son capaces por sus historias personales, que entiendo perfectamente, deberían permitir que otras con otras experiencias expresen sus opiniones.

Natalia Fuentes, Matrona

Natalia Fuentes participa en el XIII Congreso FEDALMA dentro de la Mesa Redonda «La mujer lactante hoy». Su ponencia trata del «¿Cómo abordar la diversidad cultural?».

“Las asesoras deben comprender las fortalezas y debilidades de las mujeres de las diversas culturas”

Natalia Fuentes López es matrona en el Hospital General de Tomelloso (Ciudad Real), experta en sexualidad, autoconocimiento y terapia del reencuentro, así como en igualdad de género. Tiene experiencia laboral en Guinea Ecuatorial y Mozambique, entre otros, y ha investigado sobre el perfil maternal, obstétrico y social de las mujeres inmigrantes, entre otras cuestiones. Ha impartido diversos cursos y, como ponente, ha hablado del conocimiento sobre la lactancia materna entre los sanitarios y sobre la lactancia “aquí y allá”.

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Entrevista

En la mesa redonda del XIII Congreso de Fedalma va a hablar de cómo se puede abordar la diversidad cultural en los grupos de apoyo. ¿Cómo deben actuar las asesoras?

Las asesoras deben, en primer lugar, conocer la cultura (creencias y costumbres) de estos diferentes grupos en relación con la maternidad y la crianza y, en segundo lugar, familiarizarse con las circunstancias con las que conviven en nuestro contexto, de tal manera que pueden así tener una idea aproximada de cuáles son las fortalezas y debilidades de estas mujeres y, por tanto, puedan comprender en qué áreas deben ser apoyadas y/o reforzadas, y en qué otras áreas pueden actuar inclusive como agentes.

En las últimas décadas, España se ha empapado de muchas culturas extranjeras. Entiendo que los problemas a los que se enfrenta una madre lactante son similares pero, ¿qué diferencia a los distintos países en lo que a lactancia se refiere?

La lactancia materna va unida de manera intrínseca a la forma en la que se concibe la maternidad, la crianza, la forma de parir, etcétera. En mi opinión, y de manera muy resumida, la diferencia entre los distintos países y regiones se basa en la existencia o no de una “cultura de la lactancia materna”. En general, en aquellos países capaces de conservarla y/o recuperarla, existen altos índices de lactancia materna prolongada. Aquí podemos incluir, la mayor parte de países africanos, gran parte de los países latinoamericanos, sobre todo aquellos con mayor población indígena, así como zonas del norte de Europa. En la otra cara, están los países en los que tras décadas de lactancia artificial, se ha perdido esa cultura, y que poseen índices muy bajos de lactancia materna, sobre todo a partir de los cuatro meses. Entre estos países se encuentran, por ejemplo, EEUU, Rumanía, China, etc. Por supuesto, hay países y regiones que se encuentran en un punto intermedio.

No solo inmigrantes, sino que etnias minoritarias, como la gitana, podrían necesitar el apoyo de un grupo. ¿Son reticentes?

No creo que las reticencias sean en concreto hacia los grupos de apoyo, sino hacia el sistema en general. No podemos negar que existe cierta desconfianza mutua entre los trabajadores del sistema sanitario y las personas de etnia gitana. No obstante, las experiencias que se han realizado con grupos de etnia gitana han dado muy buenos resultados.

¿Cómo solucionar esto?

En general, con la superación de los prejuicios por parte de los trabajadores de la salud hacia estos grupos y teniendo un interés real por conocer y familiarizarse con su cultura y costumbres (en este caso en concreto, en relación a la maternidad y la crianza). Y, por último, creo que es importante que tomemos la iniciativa en la aproximación, buscando activamente el contacto con esta población, por ejemplo, realizando visitas domiciliarias.

Usted tiene experiencia en Guinea Ecuatorial y Mozambique. ¿Qué labores ha desarrollado allí? ¿Qué ha aprendido y qué ha enseñado?

En Mozambique era coordinadora de una ONG sanitaria que apoyaba a varios distritos de salud en el desarrollo de todas sus actividades, por ejemplo, construcción y equipación de hospitales, formación del personal, apoyo nutricional, trabajo con parteras tradicionales, campañas prevención, etc. Nuestros principales objetivos eran reducir la tasa de mortalidad materna e infantil, así como reducir el contagio por VIH. En Guinea ecuatorial, era asesora externa del Ministerio de Sanidad. Realicé el protocolo de control del embarazo, de atención al parto, de atención en el puerperio, así como la guía de planificación familiar. Fuera del Ministerio, realicé el temario de la formación de auxiliares de parto, así como una formación a parteras tradicionales. He aprendido muchísimo, tanto de lo bueno como de lo malo, sobre todo como persona, lo que creo que me ha ayudado a ser mejor profesional. Además salir de tu ‘mundo’, te ayuda a comprenderlo mucho mejor.

¿Qué opina de la situación de esos países?

Hay muchas cosas que no me gustaban; por ejemplo, el papel de la mujer en la sociedad, la falta de organización, la corrupción, la pobreza, etcétera. Además, es muy triste observar como sus progresos, en concreto en cuestiones sanitarias como la atención al nacimiento, les lleva inexorablemente hacia los mismos errores que hemos cometido y cometemos nosotros. Es una pena que no puedan aprender de nuestros errores y transcenderlos, y que parezcan abocados a repetirlos. Quizá se debe a que la dirección de estos avances sigue siendo dictada por el etnocentrismo occidental y el patriarcado. Pero, sin embargo, me enamoré de lo que todavía perdura de su cultura: de su visión transcendental y mágica del mundo, de su conexión con la naturaleza, de su forma de exprimir el presente, disfrutando de lo más simple, y de su conexión con el cuerpo y la sexualidad. En Guatemala, estuve apoyando un centro que trabajaba principalmente con los agentes sociales y con las víctimas de la violencia infringida durante tantos años de guerra y desigualdad, en especial la violencia sexual. También tuve la oportunidad de apoyar a ONG local en relación a la atención al parto, así como la formación de las parteras tradicionales. Aprendí que es esencial trabajar con el cuerpo para recuperar el cuerpo y el alma, la importancia de dar voz al dolor, y de perdonar, lo importante que es empoderarse como individuo pero también como grupo, como etnia. Comprendí las heridas y las cicatrices profundas que tienen estos países y sus gentes, y también comprendí su origen.

Asimismo, es experta en Terapia del Reencuentro. ¿Podría explicar en qué consiste?

La Terapia de Reencuentro (TR) es un modelo que fue creado por la doctora Fina Sanz, que parte de la integración de la Psicología, Sexología y Educación con una perspectiva de género y comunitaria, integrando también los aportes de otras disciplinas y tradiciones culturales. La salud se entiende como un proceso biopsicosociosexual, por lo que se analizan los procesos y se interviene en tres dimensiones: la individual, la relacional y la social. La persona es contemplada como ser sexuado integrando sus aspectos físico, emocional, mental, espiritual, comportamental y social.

¿Qué tiene que ver con la salud de la mujer en general?

La TR está pensada para el abordaje de las personas, de forma individual y/o grupal, desarrollándose un trabajo dentro de una perspectiva de prevención (autoconocimiento, desarrollo humano, educación para la salud) y terapia. En cuanto a las mujeres, al ser la TR una terapia con perspectiva de género, está claramente enfocada a trabajar con ellas, ya que se abordan tanto los problemas propios del individuo en relación a su historia, familia, guiones de vida, etc., como aquellos derivados del patriarcado, la cultura judeo-cristiana y el género, que tanto han cincelado la personalidad y problemática de la mujer. Proporciona a la mujer herramientas de autoconocimiento, de trabajo con el cuerpo, con las emociones, etc., que le permiten conocerse, empoderarse y generar cambios internos que le permitan establecer relaciones de buen trato tanto con ellas mismas como con los demás.

¿Y con la lactancia?

La TR nos proporciona muchas herramientas que nos van a ayudar a trabajar en múltiples áreas, como, por ejemplo, las siguientes:

  • Conocer y trabajar las creencias, guiones de vida, expectativas y miedos (individuales, familiares, culturales y sociales) en relación a la maternidad y a la lactancia materna.
  • Recuperar la conexión con el cuerpo, y en especial con el cuerpo sexuado.Apoyar el proceso de empoderamiento que debe suponer la lactancia materna.
  • Trabajar con las emociones, aprender a transformarlas, etc.
  • Mejorar las relaciones y la comunicación con la pareja, familia.
  • Identificar y comenzar a trabajar los diferentes duelos que pueden aparecer en relación con los procesos de maternidad y crianza (por ejemplo, con el parto soñado, el cambio físico, la pérdida de espacio personal, etc.)

Desde 2011 trabaja en el Hospital General de Tomelloso. ¿Qué se está haciendo en el hospital y en la localidad para favorecer la lactancia y otras cuestiones relacionadas con la mujer?

Respecto a la lactancia materna, el hospital de Tomelloso, no está llevando a cabo ninguna política activa para favorecer la lactancia materna, como nos muestra el hecho de que no existe un protocolo de lactancia, no se ha realizado ninguna formación específica del personal, no se ha restringido el uso de tetinas, etc. No obstante, en el paritorio favorecemos, siempre que el estado de la madre y el recién nacido lo permiten, el contacto piel con piel y el inicio de la lactancia materna dentro de las dos primeras horas postparto. En el centro de salud, cuenta con un grupo de apoyo a la lactancia materna. El personal de enfermería/matronería, tanto de especializada como de comunitaria, diseñamos un estudio de lactancia materna, con varios objetivos principales: conocer la situación real de la lactancia materna así como sus condicionantes y, a partir de esta información, poder diseñar un protocolo de lactancia materna, así como la batería de medidas que se consideren necesarias para favorecer la lactancia materna en nuestra región. Sé que en el Centro de la Mujer se desarrollan múltiples talleres y actividades gratuitas para mujeres de la localidad, pero no conozco los detalles de la mayoría. Yo, por mi parte, he realizado en el centro cuatro talleres para mujeres con diversas temáticas: Autoconocimiento para el cambio; Vínculos amorosos, favoreciendo relaciones de igualdad y buen trato; y el taller de crisis y duelos.